UN
SECRETO A VOCES
Resulta vergonzante, la postura política adoptada por Pedro Sánchez después del 28A, malogrando un Gobierno de coalición, que nos hubiera evitado estas cuartas elecciones en cuatro años; postura que, de nuevo puede muy bien ser adoptada, de no romper las cadenas que lo atan a la Oligarquía del País, de la cual formó parte entre 2004 y 2009, como consejero de Caja Madrid, y que como tal votó a favor de la emisión de las ”engañosas preferentes”, para colocarlas a clientes de Caja Madrid del 2007 al 2009, que le obligan como rehén de la Banca, la Patronal y el Ibex 35, a rechazar todo pacto político de coalición con cualquier partido progresista político, que le sea vetado por el Poder económico. Se trata por lo tanto, de que todas bases progresistas, afiliadas a un supuesto y engañoso partido Socialista, consideren la fiel subordinación de la Dirección de su actual desvirtuado y monárquico partido a esa Oligarquía, y tener muy en cuenta esa circunstancia, con el fin de apoyar con su voto, aquellos partidos progresistas que estimen oportuno, para evitar la casi segura posibilidad de unas quintas elecciones, habida cuenta que, la correlación de fuerzas entre aquellos partidos progresistas y conservadores del 28A, continúan actualmente manteniéndose muy parejas.
Con el fin de lograr definitivamente el establecimiento de un Gobierno progresista, que de urgencia necesita España, personalmente no vislumbro otra solución que la indicada, y no es absolutamente con la intención de herir susceptibilidades entre ninguna de las bases de aquellos partidos progresistas, que estimen conveniente adoptar circunstancialmente ese rechazo hacia un monárquico PSOE, cuyas bases merecen todo mi respeto; una medida que, lejos de perjudicar a su partido, debería significar la necesaria regeneración del mismo, dándole a la Dirección de su partido la bien merecida lección, a la que durante 40 años se ha hecho acreedora, con su incompetente y corrupta acción política bipartidista.
