¿QUÉ HACEMOS CON ÉL?

¿QUÉ HACEMOS CON ÉL?

Decididamente aquella foto lo lanzó al estrellato, sobre los cuatro rincones del planeta. Su perfecto anonimato, a la velocidad de la fuerza gravitatoria (infinitamente más rápida que la de luz), transformó momentáneamente su ridícula personalidad, en un destacado escudero de dos importantes caballeros; su amplia y satisfecha sonrisa de aquella instantánea, supera con creces la de sus dos mandatarios, prueba evidente de su complacencia, en aquel histórico momento (1).

Con toda seguridad, aquel solemne momento, fue suficiente para transformar el ego de
aquel insignificante escudero, en el de un principal caballero, que con enfermiza autosugestión, se ha convertido en un “Don Quijote de la Mancha 2”, para pasear mundanalmente, sus enfermizos delirios de grandeza.

Agradeceríamos el concurso de algún destacado médico psiquiátrico. para establecer un diagnóstico autorizado, acerca de la esquizofrenia que aqueja a nuestro antiguo escudero, cuya paranoia lo tiene actualmente transformado, en un creído importante caballero “desfacedor” de entuertos. El dictamen médico al respecto, determinaría la urgente decisión a adoptar con ese “andante payaso”. A nuestro entender no caben otras dos soluciones, su internamiento en un Establecimiento Psiquiátrico, o que el Ministerio del Interior le retire su pasaporte, para evitar sus ridículas intervenciones foráneas, ¡suficientes tenemos con las protagonizadas en nuestro país!.

Es evidente que va a resultar difícil larga y dolorosa la regeneración de nuestra Deuda Pública, tal como él “sagazmente” manifestó en aquella “tertulia columbiana”; en nuestras carnes lo estamos ya comprobando y de ¡qué manera!. La magistral intervención de nuestro personaje en aquel circo de la Universidad de Columbia (NY), acerca de la dificultad de España para hacer frente a su Deuda Pública, adobada con su clara demostración de afecto, hacia los “amiguetes” Muamar al Gadafi. Hosni Muvarak y Abidin Ben Alí, fue una clara demostración de la disociación de sus funciones psíquicas. En cuanto a la amistad o afecto que le une a esos tres mencionados personajes, comprendemos que puede estar justificada, por el poso atávico que todavía yace en su subconsciente, relacionado con la afinidad de sus pensamientos hacia nuestro “glorioso caudillo”; posiblemente alguno de sus allegados, le ha hecho comprender el enorme desliz de sus declaraciones, respecto a la simpatía vertida hacia aquellos tres personajes, y para quedar como un señor, nos sale ahora por peteneras diciendo, que donde dije “diego”, quise decir “digo”.

¡Qué guapo estaría usted con la boca cerrada!. Créaselo, en cuanto la abre, ¡piernas para qué os tengo!. En su reciente “payasada” en la Universidad de Columbia, habría sido también muy interesante, que hubiera usted informado a los propios americanos y al resto del mundo, acerca de los 10-000-000-000-000 (diez billones de dólares USA, casi mejor calificarlos como dolores), de la propia deuda de aquel estado, ¡no menos importante!, que la de casi todos los países restantes del planeta Tierra, y lo “fácil” que está resultando y continuará siendo para ellos restablecer sus equilibrios presupuestarios; globales desequilibrios gestados a partir de la época de sus dos “brillantes” legislaturas de los 90 y 2000, hasta finales del 2008 (con gobierno socialista), en la que el “Globo” no pudo admitir más “helio especulativo” y reventó; todo ello bajo la complacencia, vanagloria y orgullo de incompetentes Jefes de Estado como usted y sus correspondientes equipos económicos, éstos que ahora se jactan de darnos a conocer el sexo del animal, una vez que ha parido la burra.

Este pequeño comentario que acabamos de hacer respecto a su última actuación en el “Circo Columbia", debemos hacerlo, porque respetamos su perfecto derecho a estar en posesión del carnet de socio, de algún que otro espectáculo circense extranjero; en cuanto a carnets nacionales, no sabemos todavía cuál otorgarle; el último de nuestro rango, “Patriota de Pacotilla”, es posiblemente el más adecuado para la alta alcurnia de un frustrado y delirante escudero de su categoría-

(1). Incongruentes manifestaciones de un próximo pasado, hechas públicas en otro foro USA , por el personaje objeto del precedente comentario (hay que reconocerlo, el bufón tiene buen cartel en aquel país), nos movieron a dedicarle el más preciado de nuestros elogios en nuestro comentario: “APOCALÍPTICO VISIONARIO”, blog: MARTALEGUA, 03-02-11.