¡¡¡
QUEREMOS, DEBEMOS Y PODEMOS !!!
Sin la
necesidad de ningún estudio sociológico podría afirmarse, que a partir del
momento en que el ser humano, alcanza una edad avanzada, se admite que el
tiempo transcurre demasiado rápido, especialmente para aquéllos que empiezan a
superar el “tercer plazo” de nuestra existencia, y por propias experiencias y
vivencias personales, comprobamos que el tiempo transcurre incluso mucho más
rápido para aquéllos que van alcanzando la cuarta o la quinta edad; esos “jovencitos” pueden corroborar el rápido
transcurrir del vencimiento de su deuda con la Naturaleza, donde los meses
parecen transformarse en semanas y los años en meses, en total contraposición
con aquellas sensaciones veinteañeras de
los mismos, cuando se consideraba que el tiempo transcurría tan lentamente, que
parecía nunca íbamos a alcanzar una ansiada independencia.
Paradójicamente,
y sin duda debido a los actuales y convulsionantes momentos políticos,
económicos y sociales por los que está atravesando nuestra Sociedad, las
sensaciones mencionadas en el precedente capítulo, se invierten de 180 grados
con aquellas personas que han alcanzado la tercera edad, y mucho más por
aquéllas que ya han entrado en la cuarta o la quinta, éstas experimentando de
nuevo las sensaciones de aquellos veinteañeros tiempos, en que el tiempo parecía quedarnos estancado,
en la lenta espera de la realización de nuestros futuros proyectos.
Personalmente esas son las sensaciones que estamos experimentando actualmente, considerando
que para gentes de la “quinta edad”, significa “fiarles muy larga” esa espera
hasta los meses de mayo y noviembre del próximo año, primera y última etapa de
partida, para que España empiece a experimentar un total cambio económico,
político y social, no exento de pocas dificultades y problemas su consecución,
en cuya labor, de acuerdo con nuestras posibilidades tanto físicas (ya bastante
mermadas), como morales y mentales (éstas todavía intactas), queremos, debemos
y PODEMOS ponerlas a la disposición de esa voluntariosa y pujante juventud, comprometida en esa sacrificada y
decidida lucha de cambios. Será para nosotros un placer, si aciertan ustedes a comprenden
nuestras sensaciones de premura respecto a la espera de esos acontecimientos,
que nos permitan contemplar a nuestros hijos y nietos disfrutando del
bienestar, que desvergonzada y delictivamente a nosotros nos ha robado un
corrupto Sistema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario