CONSENSO NACIONAL

CONSENSO NACIONAL

Los aproximadamente 45 millones de "españolitos", que poblamos las cuatro quintas partes de la Península Ibérica, hemos de ser sinceros y reconocer, que estamos "casi todos", muy preocupados por la aguda enfermedad que sufren nuestras economías. No nos engañemos, la enfermedad estaba en estado latente desde hace bastante tiempo, y ha acabado manifestándose de forma muy virulenta. Esta enfermedad, desgraciadamente se está manifestando con mayor agudeza, en aquellas personas cuya fisiología los ha sorprendido con un bajo porcentaje de defensas, ¡que estadísticamente no son pocas!.

¿Quién de nosotros, ante la grave enfermedad que estamos padeciendo, no se hace esta pregunta?, ¿en cuál de los dos principales "Hospitales" existentes en España deposito mi quebrantada salud?. Porque hemos de reconocer que, la obsesiva forma con que se están disputando la captación de la clientela, los directores de ambos hospitales, al tiempo que cada uno, pregona las propiedades de sus pócimas (al parecer, antagónicas ambas), están sembrando un mar de dudas y desconfianzas entre toda la población. Ante esta situación, algo nos queda claro, y es que ninguno de los dos responsables de esas Instituciones, habrá demostrado un mínimo grado de inteligencia y sensibilidad , persistiendo en la postura de imponer sus remedios, como única solución a la grave enfermedad que nos aqueja.

Recapaciten señores, no queda tiempo ni espacio para demagogias, aparquen sus amicales disputas para mejores tiempos; toda negociación, comienza con una voluntad de diálogo, cuan mayor sea la sinceridad de las posturas, mayores serán las posibilidades de alcanzar un acuerdo para las partes. De no ser así, habrán demostrado que su "juramento de Hipócrates" (constitucional o bíblico), lo están aplicando en aras de sus propios y personales intereses, pero no en beneficio de aquéllos, a quienes ustedes se deben y que están pagando religiosamente sus primas, para que vuecencias disfruten de una privilegiada situación. Tales comportamientos, significan exacerbadas y egoistas posturas, que acabarán costándoles un alto precio.



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