EL
GRAN BLUFF DEL ACTUAL SISTEMA FINANCIERO
La batalla que actualmente están librando los 31 miembros de nuestro Tribunal Supremo español, para dirimir a cargo de cuál de las dos partes, la Banca o su Clientela, debería hacerse cargo de los gastos de la formalización de una hipoteca, es una clara muestra de la extrema debilidad de nuestro actual Sistema Financiero, ya que en realidad sin discusión partidista de ninguna clase, por pura lógica esos gastos deberían ser asumidos por la Banca, ya que suficientes gastos asume su clientela, atendiendo los intereses de su compromiso hipotecario, puesto que esos gastos son la garantía para la Banca, para recuperar el importe de su préstamo.
Caso de que el mencionado Tribunal fallase a favor de la Banca, esa postura vendría a reconfirmar la debilidad de nuestro Sistema Financiero, representado en su mayor parte por la “Gran Banca”, embargada toda ella por los efectos de un defectuoso y erróneo Sistema Económico, y no menos por el enorme lastre originado por la Crisis provocada por la catastrófica explosión de una Burbuja Inmobiliaria, que ha colocado al Sistema Bancario, bajo muy dudosos niveles de garantía, siendo detentora de una importantísima porción de nuestra actual Deuda Pública, representada por los bonos, pagarés y letras del Tesoro; una situación que debilita de manera extrema la solvencia y garantía de toda la Banca, puesto que sólo imaginando, que una pequeña parte de su clientela fuera a disponer inesperadamente de la liquidez depositada en sus cajas, a no dudar, el reembolso en especies a esa pequeña porción de clientela, a una gran parte de ella, se le habría de hacer efectiva con la porción de un trozo de autopista, de un trozo de aeropuerto, de algún que otro “palet” de ladrillos, etc.; es por lo que objetivamente a nuestra “Gran Banca”, aun a pesar de los 14000 millones de euros de beneficios obtenidos por comisiones en el ejercicio 2017, no se le puede hacer responsable del cargo de los gastos hipotecarios en cuestión, que vendrían a disminuir el coeficiente de garantía, que obligatoriamente debería en todo momento conservar. Es por lo que creemos que nuestra “benévola Justicia”, acudirá aunque no debiera, en ayuda de nuestra “Gran Banca”, sentenciando que los gastos de esas operaciones hipotecarias, corran a cargo de sus sufridos clientes; ¡¡el chocolate del loro esos pequeños gastos, comparados con los graves problemas financieros que tiene planteados el actual Sistema Financiero mundial, un gigante con los pies de barro!!.
La batalla que actualmente están librando los 31 miembros de nuestro Tribunal Supremo español, para dirimir a cargo de cuál de las dos partes, la Banca o su Clientela, debería hacerse cargo de los gastos de la formalización de una hipoteca, es una clara muestra de la extrema debilidad de nuestro actual Sistema Financiero, ya que en realidad sin discusión partidista de ninguna clase, por pura lógica esos gastos deberían ser asumidos por la Banca, ya que suficientes gastos asume su clientela, atendiendo los intereses de su compromiso hipotecario, puesto que esos gastos son la garantía para la Banca, para recuperar el importe de su préstamo.
Caso de que el mencionado Tribunal fallase a favor de la Banca, esa postura vendría a reconfirmar la debilidad de nuestro Sistema Financiero, representado en su mayor parte por la “Gran Banca”, embargada toda ella por los efectos de un defectuoso y erróneo Sistema Económico, y no menos por el enorme lastre originado por la Crisis provocada por la catastrófica explosión de una Burbuja Inmobiliaria, que ha colocado al Sistema Bancario, bajo muy dudosos niveles de garantía, siendo detentora de una importantísima porción de nuestra actual Deuda Pública, representada por los bonos, pagarés y letras del Tesoro; una situación que debilita de manera extrema la solvencia y garantía de toda la Banca, puesto que sólo imaginando, que una pequeña parte de su clientela fuera a disponer inesperadamente de la liquidez depositada en sus cajas, a no dudar, el reembolso en especies a esa pequeña porción de clientela, a una gran parte de ella, se le habría de hacer efectiva con la porción de un trozo de autopista, de un trozo de aeropuerto, de algún que otro “palet” de ladrillos, etc.; es por lo que objetivamente a nuestra “Gran Banca”, aun a pesar de los 14000 millones de euros de beneficios obtenidos por comisiones en el ejercicio 2017, no se le puede hacer responsable del cargo de los gastos hipotecarios en cuestión, que vendrían a disminuir el coeficiente de garantía, que obligatoriamente debería en todo momento conservar. Es por lo que creemos que nuestra “benévola Justicia”, acudirá aunque no debiera, en ayuda de nuestra “Gran Banca”, sentenciando que los gastos de esas operaciones hipotecarias, corran a cargo de sus sufridos clientes; ¡¡el chocolate del loro esos pequeños gastos, comparados con los graves problemas financieros que tiene planteados el actual Sistema Financiero mundial, un gigante con los pies de barro!!.